Hace unos meses os contaba que cada vez veo más clara la necesidad de cambiar de hábitos y llevar una vida más respetuosa y consciente, cuidando mi alrededor y nuestra fuente de vida, la naturaleza. En este proceso, conocí el movimiento Zero Waste, y empecé a aplicarlo a mi vida, y al principio me pareció complejo y difícil, como si estuviera tan acostumbrada a vivir con ciertas comodidades que aplicar algunos cambios, como una vida sin plástico y con el menor residuo posible, fuera casi imposible.
Empecé aplicando las pautas de esta forma de vida en mi cocina, pero poco a poco ha ido ganando lugar en mi casa y se va extendiendo a otras zonas. Sólo he necesitado tiempo, paciencia y conciencia, y todo ha ido viniendo. Pero aún estoy muy lejos del residuo cero, aunque me voy acercando, siempre con los ojos bien abiertos y muy atenta a lo que consumo. Al final, se está convirtiendo en una forma de cuidarme, de cuidar a mi pequeña familia y sobretodo contribuir a la mejora de mi entorno.
Os dejo los cambios que he aplicado en el baño con sus respectivas fotografías, pequeños grandes cambios!
- Cepillos de dientes de madera/bambú
Una inversión fácil y sencilla, que no implica un gran cambio. Prueba y encuentra el cepillo con el que más bien te sientas, puede que no aciertes con el más adecuado para ti a la primera, quizás los sientas duros, diferentes, dolorosos… pero si vas probando seguro encuentras el tuyo! A mi éste del Natura me está yendo muy bien y lo recomiendo!
Una de las cosas que tenía claro que quería cambiar era el uso de pastas de dientes industriales por la cantidad de productos químicos e ininteligibles para mi. Con esta receta de pasta de dientes tan fácil, cambiar de costumbre ha sido algo muy sencillo.
RECETA PASTA DE DIENTES:
Ponemos 8 cucharadas de arcilla blanca, 3 de infusión de salvia y 3 de infusión de tomillo. 4 gotas de aceite esencial de árbol del té y 3 gotas de aceite esencial de menta. Finalmente, un pellizco de sal.
Lo mezclamos bien hasta que quede una pasta compacta. Si nos queda muy líquida añadimos arcilla hasta que quede densa. La ponemos en el frigorífico y dejamos reposar un día.
A la mañana siguiente ya está lista para su uso!

Poco a poco he ido eliminando el plástico de mi baño, los jabones sólidos han sido un gran descubrimiento. Ya he hecho varias compras con Lush y voy probando nuevos productos, como el acondicionador sólido que os dejo en la imagen. La verdad es que no todos me funcionan igual de bien, por ejemplo al champú y al acondicionador me ha costado un poco acostumbrarme pero ahora no los cambiaría.
Tengo una piel muy seca y siempre iba buscando cremas hidratantes para enriquecerla pero nunca me terminaban de gustar, ni por la sensación que me dejaban con la piel pegajosa ni sentía que me nutrieran realmente. Des de hace unos meses uso aceite de coco para hidratar la piel de mi cuerpo y sobretodo de mis manos.
Aún así, sigo utilizando cremas hidratantes para la cara ya que enseguida me salen granos y aún no he encontrado un aceite que me funcione bien. ¿Alguna recomendación?
Y aquí un tema que nunca me hubiera imaginado que haría y perdonadme porque es un tema escatológico. Realmente el uso de papel de baño es un tema que me preocupa mucho, y aunque he disminuido mi consumo lo sigo usando, pero sólo lo utilizo en mis días de menstruación y cuando voy al baño a hacer cosas “mayores”.
He encontrado una forma para disminuir el consumo que es mediante el uso de pañuelos de ropa (creados a base de camisetas antiguas y agujereadas), que guardo en esta bonita bolsita al lado del baño y una vez los utilizo van directos al cesto de mimbre que queda cerrado.
Cuándo decidí hacer ésto me preocupaba el olor, que no hiciera todo el baño hedor a pipí por culpa de esta decisión, pero para mi sorpresa no ha sido así!
Eso sí, se debe lavar a menudo las toallitas sucias para que no penetre el olor en el mimbre!
Amo esta pinza con mucha fuerza (si es que algo material se puede amar), me parece tan, tan, tan cómoda! Hace muchos años que la utilizo y es muy agradable. Al tener mucho pelo y bastante largo, con las gomas siento que no se me aguanta bien y que cada vez que las uso se me van dando hasta ser inservibles.
Aún así sigo usando gomas para el pelo pero muchísimas menos y en ocasiones puntuales: para trenzarme el pelo, para ir a correr o hacer deporte, etc.

Otro cambio bien sencillo, cuando se te rompa el cepillo aprovecha y cómpralo de madera, así de fácil! (A mi éste no me sirve, las púas son demasiado estrechas y peinarme se convierte en una guerra contra mi misma!).
Podéis encontrar cepillos de varias clases y formas en la tienda online de Sin Plástico!

De toda la vida y para toda la vida. Las encontrarás en mil y uno lugares y a buen precio!

Los que me conocen ya saben que soy una firme defensora de este producto, por su comodidad, ahorro y cuidado del entorno. La verdad que es una de las mejores inversiones que he hecho en los últimos años a nivel de salud. Ya no me preocupa el tema de manchar los pantalones o el pijama por las noches (algunas me entenderéis), ya no tengo que pensar en coger las compresas o tampones, ni me toca pasar la vergüenza de pedir a la gente de mi alrededor estas cosas porque soy un auténtico desastre y no calculaba que me bajara la regla… Se acabó, ahora soy feliz, más despreocupada con este tema y mi bolsillo y el medio ambiente lo notan!
Y ya mi último cambio, dejar de usar pañuelos de papel de un solo uso para utilizar pañuelos de ropa, creados con la tela de un antiguo pijama y guardados en este bonito neceser! Fácil, económico y sin huella para el planeta!
Y hasta aquí mis 10 cambios, compras, reutilizaciones, nuevos usos de productos, etc., en el ámbito del baño. Me queda camino por hacer pero me siento satisfecha con los pasitos que voy realizando!
Espero que te pueda servir y si tienes otros trucos no dudes en dejármelos en los comentarios!
Gracias por leerme y feliz día,
Judit. 🙂
Deja un comentario